O lo que es lo mismo… uno de cada cinco menores en Europa es víctima de violencia sexual. Número escalofriante cuando lo pasamos a números absolutos. Muchas veces tenemos la sensación de que este tipo de situaciones únicamente se producen en los países en desarrollo, pero desgraciadamente es algo más común de lo que tendemos a pensar, y más oculto por la sociedad y por las instituciones involucradas.
Esta violencia en los menores se produce tanto en el seno familiar como en instituciones cerradas de la índole de escuelas, centros de acogida y de la propia Iglesia.
En el terreno de la violencia sexual en menores es mucho el desconocimiento que tiene la sociedad, tanto de los datos reales (están muy ocultos y no hay actuaciones al respecto) como de los mecanismos sociales que hay a disposición para los padres y personas que deseen conocer más al respecto.
La educación y la prevención son las mejores armas para luchar contra este mal de la sociedad. Los niños y niñas menores tienen muchos tabús y dificultades para exteriorizar este suceso, cosa que hace difícil su detección y por consiguiente su resolución. Es importante que los niños tengan unas personas de referencia que les permita explicar este incidente ya que se ha demostrado que los teléfonos no son eficientes para estos casos.
Os recomiendo la lectura de la entrevista, donde podréis obtener más información al respecto. Lee pulsando aquí.
¡Por una infancia digna!
Saludos,
Mario.
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