«Los lideres que sin tolerantes ante los fallos derriban las barreras que les
separan de los demás y se comprometen con las personas de manera personal»
(Richard farson y ralph keys autores de «The paradox of innovation»).
Todos somos humanos, y todos tenemos el derecho, y el deber a la vez, de equivocarnos. De los errores se aprenden, y de ellos no nos libramos ninguno de nosotros, por muy perfeccionistas que seamos.
Y ello incluye a las jerarquías superiores en las empresas. Aceptar el error es una forma de apoyar y reconocer el esfuerzo de sus colaboradores. Empresas que confían en sus empleados y que apoyan a sus talentos son tolerantes a los fallos. Si no se hacen cosas nuevas no erramos, en cambio si queremos seguir adelante y progresar, hemos de arriesgar, y los fallos son parte del juego.
Así que, como nos dijo Javier Marigorta en una ocasión, APLAUDAMOS AL ERROR!!!!
Namasté,
Mario.